El aguila y la Luna

El aguila y la Luna

Acaloradamente

Acaloradamente

La lluvia de noche
no solo es romántica
sino también sensual.
A veces abro las persianas
para ver como las gotas
pegan en los vidrios
y dibujan formas de cristal.
Que los truenos sean testigos
de esa singular imagen,
donde la dulzura roza
con el borde
de la pasión en prosa.
Y estas recostada
en mi pecho,
escuchando el latir
de este corazón enamorado,
haciendo su canción en pausas,
porque tu existencia,
es la fortaleza de su causa.

Y es el amor el que nos da su calor,
porque no se puede evitar
compartir las noches
sin crear un vínculo
que es único
como el deseo de sentirte,
pues mi carne desnuda
jamás podría mentirte.

Siempre el aroma de su cuerpo
me  invita a enloquecer
sin perder el tiempo
pero, a la vez despacio
para que en la habitación
sólo se perciba el movimiento.
Para que sólo se sienta
un suave gemido,
de ella,
en su placer
y que con su boca ardiente
me bese delicadamente
como en un susurro,
como en un secreto,
como en un instante
liberado acaloradamente,

convirtiéndome en su amante.

De Sol Elk

Anónima tu piel

Anónima tu piel

Tu piel me inspira,
tu piel me incita
a bordear por la locura.

Cuantos sentimientos
reprimidos
me obligas a dejar escapar.

A sabiendas
que cuando me entrego
ya no me puedo controlar.

Sentirte viva,
sentirte mía,
me parece
el más goloso privilegio.

Amor sincero,
perderme entero,
es lo que tu piel
me promete…
en este cuarto,

en este anónimo encuentro.

De Sol Elk

Donde no exista el adiós

Donde no exista el adiós

Y así queman mis besos
por tu espalda
y por el arte de tu cuello,
pulsando en cámara lenta
la pasión de un secreto,
así,
en dócil secuencia,
recorriendo;

cada páramo de tu piel.

Esa que hierve
con el temblor del alma,
porque el tiempo
para estas cosas;

nunca es el suficiente.

Pero el hoy, es el ahora,
y es nuestro instante,
nuestra escena,
esa misma,
donde los cuerpos
superan a cualquier magia
esfumando;

desgastadas nostalgias.

Infinito frenesí
de siluetas mezcladas
y aromas sensuales,
la noche siempre es cómplice,
pero el día puede ser extenso
con lo salvaje;

con lo intenso.

Primavera silvestre
donde tus campos florecen,
enterneciendo
a cada gota de sudor exaltado,
allí donde los labios;
 
seducen al pecado.

Despojado de dudas,
se expresa el corazón,
y es la carne
su más fino instrumento,
para sacarle a la vida
tan bellas melodías,
esperando que nunca llegue…

el momento de un adiós.

 De Sol Elk

Cuando te espero

Cuando te espero

Estoy esperándote
con la amistad de la noche,
y ya estoy pensando
en las cosas que quiero decirte
y preguntarte.

Me voy a tomar mi tiempo
para pasar mis manos
por tu cabello dorado,
sensualmente perfumado.

Me quedaré obnubilado,
mirándote a los ojos,
perdiéndome en su color
con mis pensamientos mas locos.

Me sentaré a tu lado
para recitarte prosas de mi corazón,
muy suavemente,
como en un murmullo,
como en un romántico secreto.

Y aprovecharé cada oportunidad
para rozar tu piel
con caricias fugaces,
pero tímidas
y dóciles a la vez.

Me perderé en la luz de tu sonrisa
soñando despierto
con robarte un beso,
voy a pedirte que te quedes
acompañándome con tu voz,
porque quiero saberlo todo de ti.

Sabré escucharte
para que me enseñes tus misterios
y así aprenderé a conquistarte;
quiero saber
si pasaremos una vida juntos
para bañarme de tu fuerza
pero ha llegado el momento
y debo dejar de escribir,
porque tocas a mi puerta.